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Buenas perspectivas para el film plástico, según Ceresana

Los films plásticos se vuelven más fuertes y transparentes si se estiran longitudinal y transversalmente durante la producción. Los plásticos «biaxialmente orientados» polipropileno (BOPP), polietileno (BOPE) y poliéster (BOPET) se procesan para fabricar envases, bolsas y sacos, películas retráctiles y estirables, pero también, por ejemplo, film agrícola, material de aislamiento y películas industriales. Según el último estudio de Ceresana sobre el mercado global de películas plásticas flexibles, que ya va por la tercera edición, los ingresos generados con estas películas aumentarán hasta los cerca de 339.000 millones de dólares en 2032.

Un mercado que crece a pesar de las prohibiciones regulatoriasEl mercado del film para envase y embalaje está creciendo con fuerza, a pesar de que cada vez más países intentan tomar medidas contra los residuos plásticos. Dentro de la Unión Europea, las bolsas de plástico desechables con un grosor inferior a 0,05 milímetros están prohibidas. Sin embargo, algunas cadenas de supermercados ahora simplemente ofrecen bolsas ligeramente más gruesas, por ejemplo, con espesores de pared de 53 o 55 micrómetros. Además, las bolsas de camisa delgadas, de menos de 15 micrómetros, seguirán estando permitidas en la sección de autoservicio de alimentos perecederos como frutas y verduras.

En este sentido, los analistas de Ceresana esperan un crecimiento medio anual del 3,9% para las películas BOPET más gruesas, de 50 micrómetros o más, que se utilizan, por ejemplo, para artículos de papelería o electrónicos.

El COVID y el e-commerce juegan a favorLa tendencia del incremento de las ventas online y de los envases individuales por motivos higiénicos siguen en vigor, incluso después del final de la pandemia de COVID-19. Estas tendencias no solo aumentan la demanda de embalajes secundarios y de transporte, como películas retráctiles y estirables, sino también la de cintas adhesivas, la mayoría de las cuales también están hechas de películas plásticas.

En los países donde ya funcionaban, las “tiendas residuo cero”, que ya suponen un pequeño nicho, fueron duramente golpeadas por el COVID. En el resto del mundo, en cambio, la tendencia hacia los envases de plástico continúa sin cesar.

Las bolsas para bebidas y los envases aptos para microondas en particular están en aumento, al igual que los envases individuales que ofrecen una mejor dispensabilidad y vida útil. En la actualidad, sin embargo, la inflación persistentemente elevada en muchos países está provocando un cierto deterioro de la confianza de los consumidores.

Film agrícolaLas películas agrícolas son otro segmento con fuerte crecimiento: el cambio climático implica condiciones climáticas extremas más frecuentes, lo que a su vez aumenta la necesidad de una mejor protección de los cultivos, como los campos de fresas y espárragos, por ejemplo. Igualmente, la actual intensificación de la agricultura también está aumentando el consumo de películas agrícolas.

En este campo, los bioplásticos presentan un gran potencial y tener éxito comercial en la horticultura, la agricultura y la silvicultura: las películas hechas de almidón, ácido poliláctico (PLA) u otros biopolímeros no tienen que desecharse a un alto costo después de su uso, y pueden servir como compost.

Otras industrias también recurren cada vez más a los productos «bio»: las pinturas, revestimientos y materiales aislantes de base biológica, por ejemplo, se suministran adecuadamente en envases de base biológica por parte de la industria de la construcción.

El estudio de Ceresana analiza el mercado global de film plástico con previsiones hasta 2032. Así, incluye datos de volúmenes de producción y demanda en toneladas, además de ventas, tanto en euros como en dólares.

Fecha publicación: 24/05/2023

Mundoplast - tendencias

"Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural: Europa invierte en las zonas rurales"

https://ec.europa.eu/agriculture/index_es

               
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